El ritual para activar tu piel ¡y tus piernas!

A menudo nos crea mucha confusión el hecho de confeccionar una rutina de cuidado que se adapte a nuestra necesidad como un guante. Hay siempre pasos imprescindibles, productos que debemos ir incorporando y rutinas que debemos llevar a cabo. ¿Cómo puedes ayudar a reactivar tu piel? Vamos a resolver todas estas dudas que te estarás formulando con el siguiente ritual, sencillo de incorporar en nuestro día a día:

1. Análisis. En primer lugar, estudia tu piel y sus posibles cambios en estado y calidad, no actúes a lo loco. Fundamental para los siguientes pasos.
2. Limpieza. Una perfecta higiene, es el mejor pulmón celular. La limpieza debe ser exhaustiva, y diferente por la mañana que por la noche. Antes de acostarte, recuerda realizar una higiene adecuada al estado de tu piel.
3. Hidratación. Al acostarte y al levantarte, proporciónale el desayuno y la cena a la piel. Para apostar la hidratación necesaria.
4. ¡Cuidado con los espacios cerrados! Huye de localizaciones cargadas de malos humos. Es un mandamiento esencial en esto de no asfixiar la piel. Por ejemplo, el tabaco actúa desde fuera como oxidante celular; por dentro, degrada y disminuye entre otras cosas los niveles de vitamina A, lo que produce cambios en la cantidad y calidad de colágeno y elastina.

5. La actividad y la alimentación. ¡Dos imprescindibles que no podemos perder de vista! Es muy importante, mantener una alimentación saludable y variada. Incorporar en nuestro día a día movimiento y actividades a nuestras piernas ¡y a la piel! Pieza clave para encajar el resto de pasos.

6. Por último, ¡No a la sobredosis!. Suena paradójico, pero el exceso de hidratación es tan perjudicial como la carencia. Como apuntan los especialistas, es fácil activar la piel, pero es difícil encontrar el equilibrio.